Ejemplos de guión largo
¿Qué es un guión largo?
El guión largo (—) o también conocida simplemente como raya es un signo ortográfico similar al guión corto (-) pero como indica su nombre tiene una extensión ligeramente más larga. El uso que tiene es básicamente para añadir comentarios o aclaraciones dentro de un texto.
Cuando se da esto, dicho guión va al inicio y al final del comentario, es en cierta forma similar a los paréntesis y se deben tener en cuenta las normas ortográficas como son por ejemplo el añadir el punto final, al final del texto incluso cuando lo último que esté sea la raya, su uso puede darse también dentro de un paréntesis y las comillas.
Finalidad
El objetivo de este signo es como dijimos para añadir comentarios dentro de textos que van a aportar detalles adicionales acerca de lo que se está hablando sin desviar sustancialmente la atención o perder el hilo del tema central.
Su uso también es válido para señalar el diálogo de cada uno de los personajes de una historia, también puede servir como introducción en una lista de elementos y cuando ocurre esto debe haber un espacio entre el guión y el elemento, cabe decir que en estos casos la raya se puede reemplazar por letras, números u otros signos, opcionalmente se puede añadir al final de cada elemento de la lista un punto y coma.
La combinación de teclas para añadir un guión largo en una pc o laptop es Alt + 0151, el guión corto se puede encontrar físicamente en el teclado de la mayoría de fabricantes al igual que el guión bajo.
Ejemplos de guión largo
- Para preparar el postre hice una lista de compras:
— Leche,
— Cacao,
— Huevos,
— Harina,
— Azúcar, etc.
- El Viejo y el mar (Ernest Hemingway)
— ¿Me han estado buscando?
— Desde luego. Con los guardacostas y con aeroplanos.
El mar es muy grande y un bote es pequeño y difícil de ver -dijo el viejo-.
Notó lo agradable que era tener alguien con quien hablar en vez de hablar solo consigo mismo y con el mar. Te he echado de menos -dijo-. ¿Qué han pescado?
— Uno el primer día, uno el segundo y dos el tercero.
— Muy bueno
— Ahora pescaremos juntos otra vez.
— No. No tengo suerte. Yo ya no tengo suerte.
— Al diablo con la suerte -dijo el muchacho-. Yo llevaré la suerte conmigo.
— ¿Qué va a decir tu familia?
— No me importa. Ayer pesqué dos. Pero ahora pescaremos juntos porque todavía tengo mucho que aprender.
— Tenemos que conseguir una buena lanza y llevarla siempre a bordo
- Todos estábamos atónitos con su respuesta — incluso los que no creían en el— esperando algo mejor
- La forma en la que caminaba — hasta su cabello bailaba con ella— hacían que nadie la pudiera ignorar
- En una tarde oscura, a orillas de mar estaba sentada — llevaba esa túnica blanca — y empecé a recordar aquellos bellos momentos
- Al atardecer de nuestras vidas —y no lo veo tan lejos en la distancia — sabremos si realmente valió la pena todo lo que vivimos
- —¿Qué haces? dijo la niña.
—Nada en particular, solo ver la tele mientras pasa el tiempo
- ¿pero qué te sucede?—dijo ella mirandolo a los ojos— ¿perdiste la cordura?
- Todos sabemos lo que sucedió esa noche —se quedó mirandola fijamente a la cara— pero nadie quiere aceptarlo.
- Mientras corríamos por el bosque —entre los arboles fríos— la brisa nos llevaba a nuestro destino.
- Todos estuvimos de acuerdo con que había que salir de ahí —porque era lo mas lógico— e ir un nuevo espacio.