Los ingresos pasivos son aquellos que se obtienen sin la necesidad de invertir largas horas de trabajo o gran esfuerzo físico y mental. Sin embargo, debemos destacar que muchos de los ingresos que ahora son pasivos son el resultado de mucho tiempo de dedicación a la creación y desarrollo de negocios, que ahora pasan a generan ingresos pasivos a sus creadores.

La diferencia entre los ingresos pasivos y los activos es que para obtener estos últimos es necesario trabajar durante 4, 6, 8  o más horas al día. En cambio, los ingresos pasivos se perciben dado el trabajo de terceras personas o de negocios virtuales como una página web.

Ejemplos de ingresos pasivos

  1. Rentar un local o una casa.
  2. Crear un blog generar dinero mediante suscripciones o espacios publicitarios.
  3. Vender cursos en línea que ya estén grabados o escritos previamente.
  4. Invertir en la bolsa.
  5. Invertir en startups potencialmente exitosas.
  6. Vivir de la publicidad en redes sociales.
  7. Dinero obtenido por regalías.
  8. Intereses por préstanos.
  9. Rentar un auto para que otra persona lo use en Uber.
  10. Rentar maquinaria o equipos a empresa a cambio de una mensualidad.