¿Qué es un forúnculo?

Un forúnculo es conocido como una infección causada por la bacteria staphylococcus aureus, afecta los folículos pilosos, es decir, la sección de la piel en la que crece el cabello. Puede presentarse en cualquier zona del cuerpo, sin embargo, las más comunes son aquellas que tienen contacto o roce constante. Entre algunas de las áreas más propensas a los forúnculos se encuentran las axilas, los muslos y glúteos, los senos e incluso la cara y el cuello.

Se describe como forúnculo a una protuberancia o bulto que se encuentra bajo la piel. Se enrojece por la hinchazón e infección generando molestia y dolor. La bacteria que lo provoca puede entrar a través de una picadura de mosquito o una herida; también puede producirse por hongos u otras bacterias que van penetrando la piel. Esta protuberancia bajo la piel solo causa daño en el folículo piloso, también lo genera a su alrededor.

Esta afección de la piel puede ser tratada en casa pero con mucho cuidado, pues la infección se esparce con facilidad. Los forúnculos pueden presentarse más de uno a la vez en una sola zona de la piel, a esto se le llama ántrax.

Aspectos importantes en un forúnculo y sus características

Para comprender mejor lo que es un forúnculo, conocer sus principales características puede ayudar a identificarlos con mayor rapidez y efectividad:

  • La hinchazón, enrojecimiento y dolor son normales.
  • En ocasiones el área afectada puede presentar comezón.
  • Su tamaño puede crecer rápidamente.
  • Por lo general, desaparece solo; de no ser así, debe ser drenado por un experto.
  • Cuando esté maduro para drenar aparecerá un punto blanco o amarillo en su centro.
  • Su duración para sanar es entre siete y quince días.
  • Es contagioso, las bacterias que lo generan pueden transmitirse por contacto. La persona afectada no debe compartir prendas de ningún tipo.

Tratamiento

Una vez identificada la afección en la piel, se deben seguir las siguientes recomendaciones para su correcto tratamiento a fin de evitar infecciones y la propagación de los forúnculos:

  • La higienes es esencial para tratar, controlar y evitar los forúnculos.
  • Evite tocar el área infectada, no se debe molestar, espichar ni intentar drenar.
  • Se recomienda lavar la zona en la que se encuentra el forúnculo dos veces al día con agua y jabón. Secar suavemente el área afectada con una toalla limpia.
  • Si el forúnculo empieza a drenar solo, se recomienda seguir lavando la zona y secar muy bien. Se debe cubrir el área en la que se halla la afección para no dejar expuesto el forúnculo al aire.
  • En casa se puede aplicar un tratamiento con calor para ayudar a drenar el forúnculo sin tocarlo con las manos. Consiste en utilizar pañitos húmedos y calientes sobre la zona tres veces por día por periodos de veinte minutos.
  • En caso de que el forúnculo no mejore en un periodo de dos semanas debe consultarse un médico, sobre todo si se ha presentado fiebre, malestar o aumento exagerado de tamaño.

Ejemplos de forúnculos

  • Los granos producidos por el acné pueden convertirse en forúnculos al abrirse y exponerse a bacterias.
  • Los orzuelos también llegan a ser forúnculos si se infectan.
  • Las picaduras de mosquitos con dolor y enrojecimiento, al infectarse genera el forúnculo.
  • Los absceso se generan a partir del crecimiento y contaminación de un forúnculo.