¿Qué son los abióticos?

La palabra biótico se encuentra asociada a la vida y a los organismos que la componen. También puede entenderse como aquello que permite la vida. Los abióticos indican todo lo contrario puesto que la letra “a” se antepone a la palabra “biótico” en forma de negación, es decir, abiótico significa que no tiene vida o no la permite.

A pesar de que los bióticos y los abióticos son opuestos, es imprescindible su relación para el subsistir de los seres u organismos vivos. Sin los abióticos, que se encargan de prestar las condiciones ideales y favorables para los bióticos, el desarrollo de la vida misma no sería posible. Para comprender más fácilmente su relación, entiéndase por abiótico el hábitat y por biótico las especies u organismo.

Ahora bien, existe una teoría elaborada por Thomas Huxley en 1870. Esta teoría fue llamada “teoría abiogénesis”, de allí proviene el término abiótico. No es una teoría respaldada por el mundo científico puesto que propone el origen de la vida a partir de la nada, de materia inerte o inorgánica. En este punto es entendible el por qué el término abiótico surge a partir de acá, ya que también hace referencia a lo inerte, a lo que no tiene vida.

Factores Abióticos

Como se dijo anteriormente, los abióticos hacen referencia al hábitat en la que se desarrolla una especie u organismo. Significa que aquello que compone los abióticos va directamente ligado al alimento, agua, a las condiciones climáticas, la temperatura y el suelo. Los factores que engloban estos componentes imprescindibles para la subsistencia de la vida son: El agua, el aire o atmósfera, la luz solar y las sales minerales.

El agua

Es el principal factor dentro de los abióticos, esencial para garantizar la supervivencia de la vida. Además, contribuye en mantener estabilidad en la temperatura del planeta. Sin el agua no sería posible el sistema de generación y regeneración, respiración y digestión. Es el principal componente en el cuerpo humano, una parte de la sangre, leche y fluidos vitales es agua.

Este factor se encarga de funciones esenciales en los organismos vivientes. Actúa en el interior del organismo, ayuda al trabajo metabólico que descompone los carbohidratos y proteínas consumidos. Esta acción es cíclica y solo es posible en células  vivas.

El aire o atmósfera

El aire proporciona en primera instancia el oxígeno necesario para los seres vivos, contribuye también en la fotosíntesis de las especies vegetales. Al respirar el aire u oxígeno encontrado en la atmósfera los seres vivos expulsan el dióxido de carbono. Este componente es absorbido por las plantas a través del aire en su proceso de fotosíntesis para ser devuelto nuevamente en forma de oxígeno.

A este proceso cíclico del aire también lo acompañan otros componentes importantes para la atmósfera. El nitrógeno, el agua gaseosa o agua en vapor y el ozono, son algunos de ellos.

  • El nitrógeno: Se encarga de filtrar el aire.
  • Agua gaseosa: Se habla de este tipo de agua al referirse a la formación de nubes, al llover provee agua a animales y a plantas principalmente.
  • El ozono: Su principal objetivo es no permitir el paso directo de los rayos del sol; actúa como un filtro.

La luz solar

Es importante entender la luz solar como un abiótico esencial para la cadena alimenticia. Las plantas reciben los rayos solares y se nutren de ellos, por lo tanto, aquellos animales que se alimentan de las plantas también los reciben. Para lo seres humanos funciona de manera similar, ya que la luz solar es esencial para sus siembras, para su alimentación y para la de su ganado.

Las sales marinas

Dentro de este factor se encuentra una serie de elementos que lo componen, como lo son: El calcio, el fósforo, el magnesio, el sodio, el hierro, el yodo, el cobre, el zinc y el flúor. Cada uno de ellos juega un papel importante y fundamental en los organismos.

Contribuyen en la formación, desarrollo y reconstrucción; desde el tejido, huesos, músculos y dientes. También apoyan el desenvolvimiento del metabolismo, la síntesis de hormonas y el potencial del sistema nervioso y celular.

Ejemplo de abióticos

  • La tierra o el suelo: sin ello no sería posible la siembra de ningún tipo. No habría plantas ni árboles, esenciales para la producción de oxígeno y alimento de algunas especies.
  • El aire: contribuye al proceso de fotosíntesis generando así oxígeno indispensable para todas las especies.
  • El agua: Hidrata los suelos es los que se siembra, además de ser el líquido vital para todas las especies.