¿Qué es un hábitat?

Al hablarse de hábitat, las ciencias biológicas lo definen como un espacio en el que determinado organismo hace vida. Este proporciona lo necesario para que subsistan, desde alimento y agua hasta refugio y todas las condiciones que atribuyen a su comodidad. Cada especie animal o vegetal posee un hábitat específica en la que le es posible aparearse para su reproducción y desarrollo, así como para morar en ella.

En este sentido, todo organismo toma en cuenta ciertos factores que vayan de acuerdo a sus características para así apropiarse de un hábitat, estos son de carácter geográfico, climatológico y biológico. En un hábitat logran establecerse diversas especie, pues muchas de ellas coinciden en cuanto a las necesidades que tienen y el lugar que logra suplirlas. Además, el tamaño de este puede ser tan grande como la selva y el bosque o tan pequeño como un charco de agua.

Ahora bien, la ciencia dice que el hábitat lo crea el ser que en ella mora y hace vida, sin este solo sería un espacio vacío sin razón de ser, sin la vida animal o vegetal no existiría hábitat. Es importante recordar que este término hace referencia directa a la vida y morada, es decir, lugar que se ocupa para vivir.

Tipos de hábitats

Se pueden distinguir varios tipos de hábitats, entre los cuales se hallan los siguientes:

  • Hábitat humano: En el inicio de la especie humana, sólo requerían de un espacio que proporcionara acceso a recursos de origen natural. De estos adquirían lo necesario para alimentarse y refugiarse, tenían la posibilidad de cazar y pescar, así como de recolectar recursos para protegerse de las amenazas climatológicas o animales. Actualmente, estos requerimientos han mutado, ahora, los seres humanos poseen la facilidad de adquirir estos recursos por medio de una compra o renta. Las condiciones deben ser las mismas con ciertos agregados, acceso a agua, energía eléctrica y gas, acceso a abastos para conseguir los alimentos y un techo que proporcione refugio ante el cambio de temperatura y fenómenos climatológicos. En este sentido, el hábitat humano puede ser diferenciado entre sí por el tipo de vivienda  y por el tipo de población.
  • Hábitat terrestre: Este es el ocupado por las especies animales y vegetales. Se caracteriza por poseer un ambiente tropical, claro está, esto depende de su ubicación y si este varía con las estaciones o no. Proporciona a todas las especies acceso al líquido vital, es decir, el agua, así como alimento y todo aquello necesario para satisfacer sus necesidades. Entre los hábitats terrestres se encuentra el bosques, la selva, la sabana, el desierto y la montaña.
  • El hábitat acuático: Las especies que moran en este tipo de hábitat requieren específicamente del agua para asegurar su supervivencia. Puede hallarse en agua de característica salada o dulce, pudiendo ser el mar o los ríos y lagos. En este ambiente los factores que se toman en cuenta están asociados a la temperatura, la corriente, la luz solar y hasta la composición química  del agua.

Diferencias entre hábitat y nicho ecológico

En ocasiones suele confundirse el hábitat con el nicho ecológico, cuando estos representan cosas distintas. A esta altura ya quedó claro que el hábitat se refiere al espacio en el que un ser vivo se desenvuelve y desarrolla. Por su parte, el nicho ecológico es aquel que permite entender la función que desempeña cada especie animal o vegetal en el hábitat para una mejor relación y convivencia entre estas. Claro está, en ocasiones el papel y tarea que puede llegar a tener el organismo es el de ser alimento a otra especie.

En este sentido, el nicho ecológico involucra los factores alimenticios, climatológico y antrópicos. Todo aquello que define las relaciones entre especies, su supervivencia, desafíos y competencia. Por ejemplo, el nicho ecológico de un ciervo; este se compone por el alimento que consume (de origen vegetal), por los depredadores que amenazan su existencia y se alimentan de él y, por último, de aquellos que viven a su lado o cercano a él.

En la actualidad el hábitat y el nicho ecológico son afectados por el cambio climático producido por el descuido y las acciones humanas. Esto va desde la tala de árboles hasta la extinción de especies debido al cambio de temperatura, así como también, la contaminación de aguas y la expansión de terrenos e industrias. Un claro ejemplo de esto es el hábitat y nicho ecológico del oso polar, la supervivencia de su especie se encuentra amenazada por los glaciares que se derriten a causa de las altas temperaturas de la Tierra.

Ejemplos de hábitat

  • La selva es el hábitat para la pantera y los gorilas.
  • Las montañas son el lugar apropiado para hacer vida para los osos frontinos.
  • El océano es el hábitat ideal para el tiburón blanco, la ballena azul, los pulpos, las tortugas marinas, entre otros.
  • En el bosque viven las ardillas, mapaches, aves y otros animales.
  • El río es el hábitat de las truchas y los salmones.
  • En la sabana vive el león, los antílopes, las cebras  y demás.
  • El intestino humano es el hábitat ideal para algunas bacterias.
  • Una ciudad y un apartamento puede ser el hábitat para un ser humano.