¿Qué es la Tripofobia?

La tripofobia significa perforación y es una condición en la cual una persona experimenta cierto disgusto o miedo hacia pequeños grupos de agujeros. Esta fobia surge cuando persona observa un patrón de agujeros minúsculos muy agrupados, desencadenando diversos síntomas, tales como, la ansiedad, el miedo y el disgusto.

Las personas que sufren de este miedo intenso también suelen manifestar síntomas como comezón, hormigueos, temblores y repulsión al entrar en contacto con este grupo de agujeros. En casos más difíciles, la tripofobia llega a generar nauseas, elevación del pulso cardiaco, e incluso puede llegar a ocasionar una crisis de pánico. Para esta fobia existen tratamientos, entre los cuales está la desensibilización sistemática, antidepresivos y ansiolíticos.

Causas de la tripofobia

Los investigadores de esta área consideran que las personas con tripofobia asocian de manera inconsciente los agujeros, que comúnmente están presentes en la naturaleza, con situaciones de peligro. Esta impresión de peligro surge principalmente por la relación entre el aspecto de los patrones con la piel de animales venenosos, o gusanos que generan enfermedades de la piel, tal como, la miasis cutánea.

Mayormente, las personas que padecen de esta fobia se les hace imposible diferenciar situaciones en las que hay peligro y en las que no, basándose en un reflejo inconsciente que atrae como resultado reacciones descontroladas.

Una teoría mantiene que esta fobia está relacionada a la evolución del ser humano. En la antigüedad, el hombre aprendió a impedir diversos animales venenosos, los cuales, en su piel poseían estos patrones geométricos. Por lo tanto, la tripofobia podría provenir de aquella conducta primitiva. De este modo, existe la posibilidad de que esta fobia estaría presente en los genes y no sería adquirida.

Debido a las dudas que han tenido los científicos con respecto a esta fobia, ciertos estudios alegan que más del 15% de la población experimenta esta fobia. Por lo tanto, se considera que es una fobia bastante frecuente.

Terapias y medicamentos

  • Terapia cognitivo conductual: aquí el objetivo es transformar los pensamientos, junto con los comportamientos que surgen ante la presencia de la tripofobia. Está en particular, se enfoca en el presente, en la manera en la que reacciona el paciente al momento del tratamiento, en vez de llegar a la raíz del problema.

Por medio de esta terapia, el paciente obtiene diversas habilidades que le permiten a desafiar dificultades, específicamente la incapacidad de poder tolerar una imagen con gran densidad de estas figuras geométricas

  • Terapia de exposición: por medio de este tratamiento, el terapeuta muestra al paciente de manera gradual al estímulo que causan sus síntomas, con el fin de ayudarlo a controlar la ansiedad. Lo más importante de estas sesiones es obtener la confianza del paciente afectado, debido a que esta terapia solo funciona si este derriba todas sus barreras y entrega totalmente.

Medicamentos

Primeramente, es necesario señalar que únicamente un psiquiatra tiene la posibilidad de recomendar un medicamento contra la tripofobia. Los más comunes son los tranquilizantes (ayudan al control de la ansiedad estimulada por esta y otras fobias) los antidepresivos (en los casos más fuertes de tripofobia, para impedir que atente contra la actividad común del paciente) y los beta bloqueadores (para contrarrestar los efectos de la adrenalina)