La competencia monopolística se manifiesta en los mercados en los que la cantidad de productores y/o vendedores es casi abrumadora respecto a la cantidad de personas interesadas en esos productos, es decir, hay menor demanda, aunque no quiere decir que no exista un buen mercado para ellos. Esto trae como consecuencia una inestabilidad en los precios y otras características importantes.

Este fenómeno financiero es también conocido como competencia imperfecta. Los vendedores que forman un monopolio en ese mercado, son quienes controlan el valor de los productos o servicios. No parece existir un control que regule el precio ni la calidad de los productos ofertados en una competencia monopolística.

Característica de una competencia monopolística

Además de la diferencia entre productor-consumidor, existe varias características que diferencia esta competencia de la “perfecta”:

  • Los productos ofertados son muy diferentes. Ningún productor se iguala a otro respecto a la calidad de los productos por lo que es difícil compararlos.
  • La competencia es feroz. Entre cada marca o emprendedor se compite usando sus propios precios como referencia.
  • Altos costos. Tanto para los productores como consumidores el precio de los productos o servicios alcanza montos muy por encima de lo que se espera, debido al punto anterior.

Ejemplos de competencia monopolística

  • Restaurantes de cocina de autor.
  • Restaurantes de comida rápida
  • Emprendedores autónomos prestadores de servicio (diseñadores, desarrolladores, etc)
  • Reposteros independientes
  • Minoristas de venta de ropa y cualquier tipo de producto de consumo masivo.
  • Tiendas en los barrios.
  • Empresas publicitarias.