Los pronombres personales también tienen sus reglas de uso, que si bien no es un tema bastante complicado, hay que poner atención para no tener errores de sintaxis. Uno de los fenómenos producidos vinculado a los pronombres es el leísmo.

¿Qué es leísmo?

Se trata del uso de los pronombres átonos “le” y “les” en complementos directos donde en realidad deben usarse la, las, lo o los.

Normalmente, cuando se usa un complemento directo también se usan los pronombres masculinos “lo” (singular) y “los” en plural.

Cuando los pronombres son femeninos, en los complementos directos se deben: “la” y “las”. Mientras que, cuando se utiliza un complemento indirecto, se usan los pronombres “le” y “se” (singular), y “les” (plural), para ambos géneros.

El pronombre “lo” se usa en los casos neutrales.

Ejemplos de leísmo

  • A Bárbara le vi en Barcelona.
  • A Carla le pillaron con el novio
  • Al teléfono le dejé en el trabajo
  • A los niños les he dejado en el colegio
  • La familia le vio beber toda el agua
  • A todas les vi disfrutar de la fiesta
  • A los jóvenes les ingresé en el registro de becas universitaria
  • Le deje el mensaje en la contestadora
  • A los novios les veo muy felices en la playa
  • Me gustó el computador, así que le compré