Todas las industrias que crean productos consumen determinada energía que convierten en materia prima, bien sea para ser utilizadas por otras empresas, o para su uso propio. Denominamos “Energía” a los elementos generados por la naturaleza que se encuentran en fuentes que han sido explotadas por el hombre desde su descubrimiento, como los yacimientos de petróleo.

La energía a la que hacemos referencia se divide en dos categorías: energías renovables y energías no renovables. En esta ocasión describiremos la segunda.

¿Qué son las energías no renovables?

Son un tipo de material producido por la naturaleza cuyas fuentes tienen una cantidad limitada de tal material. Eventualmente, el agotamiento de las fuentes de esos recursos energéticos llegará a un punto final del que no habrá retorno, pues, no existirá en ninguna parte del planeta.

Los tipos de energías no renovables son:

  • Combustibles fósiles. Aquellos recursos cuyo origen se centra en la biomasa generada hace millones de años y que se encuentra bajo diversas capas del subsuelo. Estos combustibles son el resultado de varios procesos donde intervienen la presión, temperatura y otros procesos físico-químicos.
  • Metales y minerales. Los minerales son sustancias naturales sólidas e inorgánicas, que tienen cierta estructura cristalina. En el caso de los metales, son elementos que conducen electricidad y tienen un aspecto más o menos brillante, como la plata y el oro.
  • Combustibles nucleares. Son recursos naturales empleados en los reactores nucleares de fisión.

Ejemplo de energías no renovables

  • Carbón
  • Petróleo
  • Gas natural
  • Gas licuado del petróleo
  • Hierro
  • Bauxita
  • Plata
  • Pirita
  • Cobre
  • Diamante
  • Níquel
  • Cromo
  • Titanio
  • Estaño
  • Oro
  • Zirconio
  • Aluminio
  • Paladio
  • Estaño
  • Cobalto
  • Rubí
  • Carbón
  • Esmeralda
  • Brea
  • Zinc
  • Yeso
  • Zafiro
  • Vanadio
  • Platino
  • Mercurio
  • Uranio
  • Plutonio
  • Acuíferos