Las actividades terciarias son las que ofrecen diferentes servicios a la sociedad. Se encarga de los objetos tangibles o intangibles (bienes y servicios). En este caso, no producen ningún producto, sino que asisten y distribuyen los servicios básicos y de consumo de forma comunitaria o individual.

Las actividades terciarias se apoyan en el sector primario y del sector secundario. El sector primario se ocupa de extraer bienes y recursos de la naturaleza (minería, agricultura, pesca, selvicultura, ganadería). El sector secundario, se dedica a la fabricación de los productos extraídos en el sector primario (desarrollo de tecnología, industria liviana y pesada).

El sector terciario entonces se dedica a distribuir los bienes de consumo y todos aquellos bienes de servicio que necesita la sociedad para vivir. Para ello, es importante saber que un bien de consumo se refiere a la adquisición de este para lograr satisfacer su empleo de modo más fácil, rápido y utilitario.

En cambio los servicios básicos son todos aquellos asuntos relacionados con la asistencia al bienestar tanto de la sociedad en general, como en lo individual en lo particular.

Los servicios básicos procuran que estos estén a la disposición de quien así lo requiera, bien para la prevención, disfrute, reparación, curación de todo aquello que pueda afectar la sana marcha desde las perspectivas biológicas, jurídicas, emocionales, recreativas, entre otras tantas.

Ejemplos de bienes de consumo del sector terciario

Los bienes de consumo son mercancías que se compran en el mercado a un precio accesible para el consumidor. La accesibilidad del precio depende del poder adquisitivo del comprador.

Los bienes de consumo son elaborados para que el sector terciario los distribuya en el comercio o comercialice con ellos. Su fin es para la complacencia en su provecho tanto en colectivo como individual.

En este caso, por ejemplo, adquirir una prenda de vestir dependerá no solo de su calidad y marca, sino si vale la pena comprarla. A la hora de adquirir cualquier objeto fabricado de forma masiva, el gusto y la necesidad del consumidor se observa si realmente compra porque lo necesita o porque le satisface su adquisición.

De allí que estos productos son fabricados tanto por la industria ligera como la industria pesada. Estos productos son promovidos por el mercado para gratificar a una cautiva clientela que efectúe la compra de ellos por hábito o por necesidad.

La industria liviana se dedica a la fabricación de bienes de consumo extraídos de la naturaleza. Su elaboración requiere mucho acierto y dedicación para que el producto, cuando llegue a las manos de quien lo compre, compense tanto en su consumo como en el uso que se le dé.

Por ejemplo, cuando alguien adquiere un teléfono móvil es porque la necesidad primaria del individuo es comunicarse con su entorno. Y, también al recibir ese aparato desea que la tecnología sea de calidad tanto por su marca y por su bajo (o alto) costo. Entre esos bienes de consumo que son distribuidos por el sector terciario se encuentran los siguientes:

  • Tazas, perfumes, vestidos de novia, rasuradoras, paquetes de galletas, juguetes, joyas…
  • Vivienda, boletos para viajar por avión, chocolate, hamburguesa, un televisor, una bolsa de pan…

En cuanto a la industria pesada, esta se dedica a la fabricación de bienes semielaborados de consumo que parten de la materia prima extraída de la naturaleza. Producen bienes de capital para la producción de otros bienes. La industria pesada necesita de la industria liviana. Entre los bienes de capital que produce la industria pesada están:

  • Cemento, máquinas de coser, automóviles, taladro, máquina de cortar hierro, bombas para el manejo de fluidos, buques de carga, fabricación de fertilizantes.
  • Computadoras, fábrica de automóviles, fábrica de accesorios para alta tecnología…

Ejemplos de bienes de servicio del sector terciario

Entre las actividades económicas del sector terciario está la producción de bienes de servicio que demanda la población.

Los bienes de servicio son los relacionados con las innumerables actividades tales como salud, educación, turismo, financiero, legal, reparación, comercio, entre otros.

Esta suele ser una actividad por cuenta propia que se ofrece a cambio de una gratificación monetaria. Estos servicios son prestados por el Estado de un país o por iniciativa privada.

Sin embargo, es importante diferenciar un bien de un servicio. El primero, se adquiere para ser consumido; el segundo presta el servicio a ese bien. Es decir, se puede adquirir una prenda de vestir y a su vez requerir un servicio extra, por ejemplo.

Es decir, quizás la persona desea acudir a una costurera para agregarle o reparar esa prenda; o la persona desea enviar esa prenda a una tintorería porque considera que no se atreve a lavarla con detergentes que pudieran dañar dicha prenda.

Tal como se lee, los bienes pueden ser regresados. Sin embargo, no ocurre así con el servicio. Los bienes pueden ser transferidos, heredado o renegociados. El servicio solo se necesita en un tiempo determinado.

Por eso, los servicios de un profesional o técnico en cualquier área del conocimiento son contratados para suplir alguna necesidad particular o en colectivo. Entre los bienes de servicio del sector terciario se encuentran:

  1. Servicios de turismo y hotelería
  2. Servicio de transporte de bienes o de personas
  3. Servicios médicos, técnico o de legalización de documentación.
  4. Servicio educativo
  5. Servicio de telefonía, de reparación de calzados, vestidos, o cualquier otro servicio que requiera reparación de bienes de consumo restaurable (bolsos, mecánica de automóvil, de maquinaria pesada)
  6. Servicio de hostelería, ocio-recreación, espectáculo
  7. Servicios de actividades financieras, distribución de bienes a través de agencias de envío y recepción a otras personas, agencias de empleos.